Saturday, October 1, 2011

Septiembre de espaldas y feliz


Un preámbulo de reflexión

Hace varios meses, una amiga muy querida me dijo una gran verdad. Esa idea que revoloteaba sobre dos tazas de té, apuntaba a que, cuando abres completamente tu corazón al universo, sin expectativas ni anticipaciones, dispuesto a recibir con alegría lo que tiene para ti, todo empieza a caer en su justo lugar, y las bendiciones no se hacen esperar. 
Suena bien, pensé en aquel momento. Aunque muy difícil, fue la coletilla. Pero, por utópica e irrealizable que pareciera, la idea se quedó allí. 
No sé muy bien en qué momento empecé a confiar.  Qué fue lo que hice, qué pequeño interruptor interno se activó dentro de mí, pero sé que poco a poco comencé a practicar el soltarme a los planes, a las ideas preconcebidas, a las seguridades que otorgan el pasado, el ego y las convenciones. Disfrutando de cada momento, único e irrepetible. Dándome cuenta que no tengo control sobre lo externo y relevándome feliz de esa carga.
La vida empezó a tomar nuevos matices. O quizás yo empecé a descubrir matices que nunca antes había notado. Esas bendiciones del universo/Dios/la vida, empezaron a llegar, o tal vez yo empecé a percibirlas. Las bendiciones de las cosas pequeñas, que al final son las que cuentan. Las bendiciones de un plato de frutas al desayuno, de una taza de té con una amiga sabia, de un breve reencuentro con alguien muy querido, de una foto lograda, de un hijo sano, de afinidades virtuales que dan pie a amistades nuevas, de un momento de romance con el ser que amas, de un rayo de luz en la ventana, de una pose de yoga mejorada, de un libro disfrutado, de un rato de juego con tus mascotas, de una casa limpia, de una pareja incondicional.
Eso ha sido septiembre. Treinta días de pequeños-grandes milagros por los que sonreír, por los que levantar mi taza de té y brindar con el corazón.

Mi mes en fotos

Les comparto algunas de mis fotos de septiembre. En La Vuelta al Mundo hemos fotografiado gente de espaldas. ¡el mural del grupo está genial! No se lo pierdan. Tampoco dejen de visitar la cadena mensual que se genera en el blog de Jackie con los enlaces individuales de los participantes, hay bellezas!!! Me encanta poner en evidencia cómo se puede transmitir tanto de alguien aún cuando no se pueda ver su rostro. Lamentablemente, sólo pude participar con cuatro fotos (y dos eran de archivo), pero aquí se las dejo:


Pero también este mes, siguiendo la idea propuesta por Jackie que como si fuera pólvora, en cuestión de días le dio la vuelta al mundo (¿cómo hace…?)  hemos tenido la dicha de juntarnos cinco fotógrafas venezolanas residenciadas en el Sur de la Florida para par un paseo fotográfico (que fue más cháchara que clics) y que ha resultado en una cantidad de afinidades inauditas. A mí, particularmente, por algún fenómeno que aún no tengo muy claro, se me paralizó el dedo de darle tanto a la lengua, así que tengo pocas fotos. Pero qué bien la pasamos.


Y como si fuera poco, también este mes he ayudado como asistente a una amiga fotógrafa en  el Invitacional de Natación de la ciudad donde vivo, ¡y ha sido una experiencia única! Les muestro algunas fotos (necesito tiempo para editarlas, voy poco a poco):


Oficialmente ha empezado el otoño, aunque el clima de la Florida no se haya enterado aún. Muy pronto llegarán los naranjas, amarillos y marrones a colorear los árboles y calles. Que, donde quiera que estés, sea una temporada muy especial!